jueves, 27 de diciembre de 2018

El valor y el símbolo de la familia. 30 de diciembre.


Festividad de la Sagrada Familia 30 de diciembre de 2018

En medio de una crisis social entorno a la integridad de la familia, la Navidad nos brinda el modelo pleno de amor familiar al presentarnos a Jesús, María y José como núcleo ejemplar de familia. Ello nos habla de todo aquello que cada linaje anhela profundamente, la entrega amorosa por parte de cada miembro que la compone.

Juan Pablo II, en su encuentro con las familias en Chihuahau en 1990, nos dijo: “La familia es la primera comunidad de vida y amor, el primer ambiente donde el hombre puede aprender a amar y a sentirse amado, no sólo por otras personas, sino también y ante todo por Dios”.
La familia siempre ha sido el principal pilar de la sociedad, el lugar donde los miembros nacen, aprenden, se educan y desarrollan. Al mismo tiempo es el refugio, orgullo y alegría de todos sus miembros.

La familia está fundamentada en el matrimonio que es una comunidad de amor y solidaridad, para trasmitir e instalar en las mentes las virtudes y valores humanos, culturales, éticos, sociales, espirituales y religiosos así como los principios de convivencia, tanto internos como externos, que tan esenciales son para el desarrollo y el bienestar de sus miembros y de la sociedad. La educación y conocimientos que se adquieren en la familia permanecerán siempre.
Sagrada Familia. Medallón del trascoro de la Catedral de Cuenca.
Todas las legislaciones del mundo, tenían que tener leyes que protegieran el concepto de la familia y facilitaran su unión y continuidad de nuevos núcleos familiares para la regeneración y el mantenimiento de la población. Seamos conscientes y sensatos en nuestras deducciones, todos sabemos que la mayoría de los problemas que tiene la sociedad, vienen de la descomposición de las familias. No se puede tener una sociedad fuerte y bien formada con un porcentaje tan alto de familias desestructuradas. Los hijos de estas familias que se han educado en esas situaciones tiene muchas probabilidad de continuar con las mismas actitudes de descomposición familiar, pues lo que han visto y sufrido, llega el momento que lo ven normal llegando a repetir lo vivido, todo ello conlleva una sociedad poco estructurada e insegura en la base, dando lugar a inestabilidad emocional.

En la festividad de la Sagrada Familia recordamos y celebramos que Dios quiso nacer dentro de una familia para que tuviera alguien que lo cuidara, lo protegiera y lo aceptara como era. Al nacer Jesús en una familia, el Hijo de Dios ha santificado la familia humana.

Feliz día de la Familia

Cuenca 30 de diciembre de 2018.

José María Rodríguez González. Profesor e investigador histórico.

sábado, 22 de diciembre de 2018

La lotería en España fue creada en el reinado de Carlos III


La esperanza es lo último que se pierde

Hoy es el día de la ilusión y de la esperanza, para otros el de la salud, pero eso al acabar el sorteo. La lotería es una de esas últimas esperanzas que todos tenemos. Esta mañana la mayoría de la gente está pendiente de la radio y la televisión, esperando que aparezcan los números. El ronroneo de la cancioncilla de los chicos y chicas del Colegio de San Ildefonso tendrá el interés y el subyugante aliciente de la gran sorpresa agradable para cada español, aun sabiendo la gran importancia de verse agraciado por la suerte, alimentará hasta el último minuto la esperanza de ser uno de los afortunados.

La Lotería Nacional Española, desde hace muchos años, se viene celebrando en día 22 de diciembre, dentro de la más escrupulosa diafanidad en sus operaciones mecánicas y esta escrupulosidad hace que no exista español alguno que tenga la menor duda acerca de su legalidad, estando así totalmente libres de temor al menor fraude.

En España este juego se remonta al año de 1276 en que publicó el Rey D. Alfonso X el “Ordenamiento de las Tafurerias”, por el que se regulaban los juegos de azar. Años después se cerrarían las casas de juego, en vista de las riñas y escándalos a que daban lugar aquellos que perdían.

Fue con Carlos III cuando se creó la Lotería actual, el 30 de septiembre de 1763. Las ganancias obtenidas se destinaban al mantenimiento de hospicios y hospitales.

Cada jugador podía jugar la cantidad que se le antojase, pues entonces se empleaba el sistema italiano y el pago se hacía en reales de vellón, maravedís, etc.

El sistema italiano de lotería que adopto Carlos III, que fue creada en el siglo XV, con el nombre de blanco o blanca carta, porque en ella entraban cartas blancas y negras, siendo las primeras las que ganaban, perdiendo, por tanto, las negras. Este sistema lotero empezaron a emplearlo los comerciantes genoveses, que daban así, salida a los artículos que se avejentaban en sus almacenes.

La primera extracción se hizo en Madrid el 10 de diciembre de 1763, a título de ensayo. En seis meses, el rendimiento alcanzó la cifra de 575.476 pesetas.

En 1808, proporcionaban a la Renta: 50.000 pesetas al hospital; 25.000, a la inclusa; más de 26.000 al Montepío del ramo; 7.500  a las Arrepentidas de Santa Úrsula; 5.000 a las recogidas en Santa María Magdalena y otras personas necesitas.

Los sorteos ordinarios eran uno por mes, y las dos extraordinarias se realizan en los meses de enero y julio. Al terminar cada extracción se celebraba después otro sorteo de 2.500 reales de vellón a favor de las huérfanas de patriotas de guerra contra los franceses.

Espero que en este sorteo Navideño los sueños se cumplan para todos y seamos condescendientes con aquellos que hayan sido menos afortunados, siempre nos queda el pedir que tengamos salud para llegar al próximo sorteo navideño.

Feliz Navidad y un próspero año 2019, lleno de ilusión y esperanza.

Cuenca, 22 de diciembre de 2018.
 José María Rodríguez González. Investigador histórico.

domingo, 16 de diciembre de 2018

La Esperanza se centró en María. 18 de diciembre.

Festividad de Ntra. Sra. De la Esperanza

¡Vendrá el Deseado de todas las gentes!
El día 18 de diciembre celebra la Iglesia de España la Expectación del parto de la Virgen María, y Nuestra Señora de la Esperanza.
El pueblo español desde el principio de su conversión al cristianismo ha sido quien, con el mayor amor, fervor y cariño ha invocado y honrado a la Virgen María. Es la unánime opinión de cuantos conocen la historia de la Iglesia. A todos los misterios de la vida de María ha tributado España especial culto, empezando por el de la Concepción Inmaculada. Pero como más se complació el pueblo español fue en representar a la Virgen María, ya desde el siglo I, con los atributos de Madre de Dios, con el Niño Jesús en brazos.
Imagen de la Hermandad de la Virgen de la Esperanza (Cuenca)

Para honrar precisamente este sublime privilegio de María, base y fundamento de todos los demás, con la solemnidad y regocijo que se merece y por las razones ya apuntadas, instituyeron algunas Iglesias de España, antes del siglo VII, esta fiesta que celebramos hoy.
Virgen de la Esperanza
En el año 656, siendo rey de España Recenvinto y arzobispo de Toledo San Eugenio, se llevó a cabo el Concilio de los llamados Toledanos en el que se cambió la festividad, al caer el 25 marzo en cuaresma y la Pasión de Cristo y no se podía celebrar con alegría la maternidad de María, todo ello llevó a los Santos Padres del Concilio a cambiar el día, al 18 de diciembre a ocho días del Nacimiento. Desde entonces se celebró en toda la Iglesia española con singular devoción y solemnidad en los días que van del 18 al 24 de diciembre, víspera de la Navidad, y de aquí, con aprobación del Papa Gregorio XIII, pasó pronto a Francia y a otras naciones.

 También es llamada esta festividad como la de la Virgen de la “O”. Esta última advocación por que las antífonas para este día, las sietes, comienzas por la “O”. Estas antífonas son muy antiguas, pues se remontan a los siglos VI y VII, en muchas iglesias solían cantarse el Magníficar y el Benedíctus, diciendo así:
“¡Oh Sabiduría, salida de la boca del Altísimo, que alcanzas de un extremo a otro y dispones todo con fortaleza y mansedumbre!, ven a enseñarnos las sendas de la prudencia.
“¡Oh Adomai (Dios), caudillo de la casa de Israel, que apareciste a Moisés en la llama de la ardiente zarza y le diste la Ley en el monte Sinaí!, ven a redimirnos con la fortaleza de tu brazo Todopoderoso.
“¡Oh Vara de Jesé, verdadero estandarte de las gentes, ante el cual aun los mismos reyes enmudecerán y las naciones implorarán!, ven a redimirnos, no tardes ya más.
¡Oh Llave de David y Cetro de la casa de Israel, que abres y nadie puede cerrar, y cierras sin que nadie puede abrir!, ven y saca de la cárcel al cautivo sumido en tinieblas y en sombra de muerte.
“¡Oh Oriente, esplendor de la eterna luz y sol de justicia!, ven e ilumina a quienes andan sumidos en tinieblas y sombra de muerte.
“¡Oh Rey de las naciones y deseado de todas ellas, piedra angular que une a dos pueblos (judío y gentil)!, ven y salva al hombre que formaste de lodo.
“¡Oh Manuel, Rey y legislador nuestro, expectación de las gentes y su Salvador!, ven a salvarnos, Señor Dios nuestro”.

Con estas cortas pero encendidas súplicas sacadas de las Sagradas Escrituras, manifiesta la santa Iglesia los vehementes deseos que tiene de ver el día conmemorativo del Nacimiento del Señor.
Capilla de la Virgen de la Esperanza

Para terminar: ¿No es maravilloso que todas las criaturas estuvieran aguardando el parto de María porque con ella  comenzaba la Redención Divina? A Ella le debemos la dicha de conocer al Redentor, de tenerle entre nosotros y de participar en los méritos infinitos de Cristo.
En Cuenca tenemos la Hermandad de la Virgen de la Esperanza, que fue fundada por el Colegio de Agentes Comerciales, desfilando en las procesiones de esta ciudad, desde el año 1952, un año después de su fundación y que podemos visitarla en la Capilla de las Petras en la Plaza Mayor.
Otro lugar de recogimiento y oración lo ofrece, para los conquenses, la ermita de la Virgen de la Esperanza, sitiada a la espalda de la parroquia del Salvador, un lugar lleno de encanto y recogimiento para estos días.
Felicidades a todas las “Esperanzas” y que María nos colme de bendiciones estos días de Navidad. Felicidades.

Publicado en Cuenca, 18 de diciembre de 2018.
Por: José María Rodríguez González. Profesor e investigador histórico.

martes, 11 de diciembre de 2018

Feliz Navidad de 2018

Que estos días de Navidad estén llenos de buenos momentos compartiéndolos con los seres queridos y con aquellos que se ven faltos de ellos por los acaeceres y acontecimientos adversos en el trascurrir de la vida.

Y desearos que en el nuevo año que comenzaremos, nunca nos falte un sueño por cumplir, un proyecto por realizar, algo que aprender y sobre todo alguien a quien amar.

Feliz Navidad y un próspero año 2019

José María Rodríguez González

jueves, 6 de diciembre de 2018

Hoy festividad de San Nicolás de Bari, 6 de diciembre


La trasformación de San Nicolás en el Santa Claus que nos venden

Coincidiendo con la celebración de nuestra asentada Constitución se celebra la festividad religiosa de San Nicolás de Bari. Un ejemplo de en la defensa de la Fe y un ardiente abogado de la verdad y protector de los pobres. Mucho debemos de aprender de él en estos tiempos que corren de incertidumbre constitucional.
San Nicolás de Bari
Parroquia de San Pedro (Cuenca)

La palabra Nicolás significa: “protector y defensor de los pueblos”. Fue un santo tan milagroso que se hizo muy popular entre los pueblos,. Pajo su advocación se consagraron,mundo cristiano, más  de mil templos. Se pedía su protección en los naufragios, en los incendios, en general en cualquier peligro que acechaba a un fiel cristiano y cuando las situaciones económicas se ponían muy difíciles, consiguiendo los favores admisibles por parte del Santo.

De San Nicolás escribió San Juan Crisóstomo y otros santos, su biografía fue escrita por el Arzobispo de Constantinopla, San Metodio.

Nació en Patera, en la región de Licia (Turquía) en una familia adinerada y desde niño destacó por su carácter piadoso y generoso, siendo educado en la fe. A la muerte de sus padres, heredo una gran fortuna la cual repartió entre los más necesitados e ingreso en un monasterio y posteriormente fue ordenado sacerdote por su tío San Nicolás Zio. Posteriormente se traslado a Myra (Turquía) en el año 314. Ese mismo año había muerto el obispo de la ciudad y los habitantes decidieron que el primer sacerdote que cruzara las murallas de la ciudad seria el nuevo obispo. Nicolás fue el primero en entrar y así fue elegido obispo de Myra.

La iconografía lo representa en la mano izquierda con un libro y tres bolas de oro como bolsitas, ello hace referencia a una historia que os cuento: En la ciudad donde vivía San Nicolás habitaba un anciano con tres hijas, sus negocios habían venido a memos y apenas tenían para poder sobrevivir y al no tener una dote para casar a sus hijas y viendo que ante la miseria que se les avecinaba el anciano pensó en prostituir a sus hijas para poder comer. Enterado el Santo por tres días seguidos al pasar por la casa de ellos arrojaba una bolsa con monedas de oro, el anciano mostró interés por descubrir quién era su benefactor, cuál fue su sorpresa al ver que quien les arrojaba el valioso don era su mismo obispo, así que salió corriendo de su casa y postrándose a sus pies le agradeció su bondad y prometiendo que nunca prostituiría a sus hijas ya que él los había sacado de la miseria en que se encontraban.   

A los pies del Santo, en el lado izquierdo vemos una olla y con tres niños dentro, es otro de los muchos milagros por el que se conoce a San Nicolás. Esta otra historia trata de tres niños: Cuenta la historia que había un tabernero que solía servir carne humana, especialmente de niños. Enterado Nicolás de tal atrocidad se personó en la taberna diciendo a su dueño que quería saber y ver de dónde sacaba la carne que servía a su clientela, el tabernero le enseñó un barril de madera donde se podía ver carne adobada sin más. El Santo hizo la señal de la cruz sobre ella y los pedazos se unieron formando a tres niños a los que devolvió a la vida. De esta historia hizo que se venere como protector de los niños y a través de los siglos lo identifiquen a San Nicolás de Bari como Santa Claus.

Esta historia de los niños y los regalos fueron deformándose y se trasformó en Alemania, Suiza y Holanda en la leyenda del “niño obispo” y con ello se inició la costumbre de que San Nicolás triaga regalos a los niños el 6 de diciembre, día en que la iglesia celebra su fiesta. Al ser popularizada en Estados Unidos por los protestantes holandeses se paganizó la historia convirtiéndolo en el “Santa Claus”. La mitra de obispo fue remplazada por el gorro rojo y lo mandaron de Turquía al Polo Norte de donde viene la nieve adjudicándole un trineo y unos renos.

Este nuevo personaje surgido de la imaginación publicitaria, se utiliza hoy en día, para vender toda clase de cosas pasando a un segundo plano su verdadera historia y su origen cristiano. Creo que va siendo hora de poner las cosas en su sitio y llamemos a cada uno por su nombre. Recuperemos a nuestro Santo y enseñemos a las nuevas generaciones que la Navidad es la celebración del Nacimiento de Dios hecho niño. Recordemos que San Nicolás fue un Santo Obispo que se preocupaba por los pobres, en especial por los más débiles, como son los niños y se distinguió por su generosidad.

Feliz día de San Nicolás.

6 de diciembre de 2018.

José María Rodríguez González. Profesor e investigador histórico.