miércoles, 23 de diciembre de 2020

Pon un belén en tu vida

Guardemos nuestras tradiciones trasmitiéndolas a nuestros hijos y nietos


La devoción a la memoria del nacimiento de Jesús nació en los primeros siglos del cristianismo. Con el nombre de Navidad y con fecha de 25 de diciembre se viene celebrando, tanto en Oriente como en Occidente, desde el siglo IV, cuando el Papa San Julio I mandó investigar la fecha exacta del nacimiento del Mesías.

En Roma, donde se guardaban los archivos del empadronamiento ordenador por el emperador Augusto, se pudo lograr hacer luz sobre este suceso, y así, la fiesta de Navidad antes confundida con la de la Epifanía y celebrada el 6 de enero, tuvo desde entonces solemnidades distintas.

Pero la devoción al pesebre por la representación de belenes o nacimientos, empezó a popularizarse y quizá a inaugurarse, en el siglo XIII con San Francisco de Asís.


Era el año 1223 cuando San Francisco logró licencia del Sumo Pontífice para celebrar el nacimiento del Salvador en el pueblecito llamado Greccia (Italia), Allí levantó un altar en el campo, preparó un pesebre, llevó un buey y un borrico y lo dispuso todo imitando la cueva de Belén, San Francisco ofició de diácono y predicó sobre las grandezas y misericordias del Mesías.
Todos los fieles acogieron con júbilo esta piedad institución del patriarca de Asís. Santa Clara la estableció en los conventos de su Orden. Ella misma ayudaba con grande gozo a disponer el Belén y exhortaba a sus hijas por todos los medios a esta devoción.
Los hijos de San Francisco propagaron por el mundo entero ésta saludable invención, mostrando siempre singular amor al Divino Infante de Belén.
En aldeas y ciudades pueden verse hoy belenes en las fiestas navideñas que suelen prolongarse hasta pasada la solemnidad de Reyes. Todos, desde lo más rústico y pobres, hasta los más preciosos, espléndidos y artísticos, dicen la popularidad a esta devoción a este magno y trascendental Misterio.
Hoy nuestra sociedad banal y materialista quiere sustituir esta devoción por otras cosas que no son en realidad la verdad de la tradición.
provechemos estos días para visitar y realizar la ruta de los Belenes que nos ofrecen las distintas Hermandades, organizada desde el día 22 de diciembre de 2018, hasta el 6 de enero de 2019 de 18.30 a 21.00 horas y los días 24 y 31 de diciembre y 5 de enero de 12.00 a 14.00 horas. Llevemos con nosotros a nuestros hijos y nietos y trasmitamos a nuestros seres queridos esta digna y buena costumbre cristiana.
El mejor belén que podemos ofrecer, siempre será nuestro propio corazón adornado con las virtudes de humildad, pobreza y amor, virtudes que estos días nos deben adornar a todos.

Felices Pascuas de Navidad.

Cuenca, 25 de diciembre de 2018.

José María Rodríguez González. Profesor e investigador histórico.


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