La llegada del Sol al
medallón de la Anunciación en la Catedral de Cuenca
Cuando la
noche dura igual que el día, cuando el equinoccio de otoño empieza a declinar
para dejar paso al solsticio de invierno, es en este tiempo, como todos los
años, el Sol nos recuerda el Adviento al quedar iluminado el medallón de la
rejería de la capilla de los Caballeros que representa el momento en que el Arcángel
San Gabriel anuncia a María que será madre. Un fenómeno asombroso que la
sabiduría popular ha dado en llamar desde tiempos: “El milagro de la luz de
Adviento”.
Medallón de la Anunciación. Efecto lumínico del 1º domingo de Adviento.
Capilla de los Caballeros. Catedral de Cuenca
|
¿Qué es el
Adviento? Es el comienzo del año
Litúrgico, que consiste en un tiempo de preparación para el nacimiento de
Cristo, su duración varía entre 21 y 28 días, dado que se celebran los cuatro
domingos anteriores a la fiesta de Navidad. Este año se inicia el primer
domingo, el día 1 de diciembre y terminará el 24 de diciembre. La palabra
Adviento procede del latín “adventus”,
cuyo significado es venida, llegada.
En la catedral
gótica es el templo de la Luz. Las vidrieras dejan pasar un tornasol de luz y
color que contribuye a crear una atmósfera espiritual. Las vidrieras son por sí
mismas todo un programa iconográfico y en nuestra Catedral conquense tiene sus
momentos especiales como es el que se da en el primer domingo de Advierto, al
que llamamos: “El milagro de la luz de
Adviento”.
El fenómeno se da progresivamente durante esta
semana, terminando de centrarse el domingo, día 1 de diciembre sobre las 12.30h
hasta las 12.45h, a lo largo de la siguiente semana, se irá descentrando hasta
su desaparición.
Este fenómeno
trata de explicar la concepción de María imitando al cuadro de la Anunciación
del pintor toscano del Renacimiento Fray
Angélico, pintado en el año 1426. El
cuadro se compone de una escena principal, la Anunciación de la Virgen y a la
izquierda del cuadro la expulsión de Adán y Eva del Paraíso. Para nosotros lo
importante es el haz de luz que emana del ángulo superior izquierdo que
traspasa ambas escenas para depositarse sobre el pecho de María.
La Anunciación de Fray Angélico. |
El medallón de
la reja de la Capilla de los Caballeros de la Catedral está formado por una
corona compuesta por distintos tipos de hojas y frutos, como granados, moras,
hojas de laurel que circunda la escena. En su interior el medallón está
compuesto por la Virgen María a la derecha, sentada, sobre su regazo un libro o
manuscrito y sobre ella la paloma, símbolo del Espíritu Santo. A la izquierda
el arcángel Gabriel portando una filatería con la inscripción “Ave María Gracia Plena” en su mano
derecha y en la mano izquierda porta una rama de nardos blancos, símbolo de la
virginidad y en el medio de la escena un jarrón con azucenas, símbolo o
logotipo de la Catedral de Cuenca, dejando claro quién fue el promotor de la
reja.
Sólo falta el
haz luminoso que lo pone la segunda vidriera del Presbiterio que en estas
fechas un haz de luz lo atraviesa dejando su color y su luz sobre el medallón,
expresando la verdad del momento: “Como
un rayo de luz atraviesa un vidrio sin mancharlo así sucedió el embarazo de
María”. En el mundo físico es una metáfora corpórea de la realidad
espiritual, concepción filosófica de la escolástica de Santo Tomás de Aquino
que resume perfectamente cómo la iconografía cristiana tiene una carga
significativa de orden superior. Es decir en la doctrina cristiana afirmamos lo
religioso partiendo de un símbolo. Como decía Santo Tomás: “no es bella una cosa porque nosotros la
amamos, sino que la amamos porque es bella y buena y todo lo bello y bueno es
verdadero”.
Disfrutemos
durante estos días de este anuncio espectacular que nos da el arte que posee
nuestra Catedral, cuando el sol brilla con todo su esplendor aportando a la
escena algo natural que se funde con la creencia religiosa que se anuncia y que
su autor nos ofrece para mayor gloria de Dios. Porque esta escena tan
fantástica no podría haber estado mejor iluminada ya que el rayo de sol que
alumbra el bello medallón, significa un rayo de esperanza para el ser humano.
Cuenca, 25 de
noviembre de 2019
José María
Rodríguez González. Profesor e investigador histórico
No hay comentarios:
Publicar un comentario