jueves, 21 de marzo de 2024

Santa Lea de Roma (384). Festividad del 22 de marzo.

  San Jerónimo nos cuenta algo de la vida de esta santa romana que se llamaba Lia o Lea y que él le da el calificativo de “La santísima Lea.

Lea, etimológicamente es el femenino de Leonardo, procede del latín y significa “aquella que es fiera como un león”.

Fue una matrona romana que al enviudar, siendo muy joven, renuncia al mundo para ingresar en una comunidad religiosa de la que llegó a ser superiora, llevando siempre una vida ejemplar.

Estas son las palabras insustituibles de san Jerónimo: “De un modo tan completo se convirtió a Dios, que mereció ser cabeza de su monasterio y madre de vírgenes; después de llevar blancas vestiduras, mortificó su cuerpo vistiendo sacos; pasaba las noches en oración y enseñaba a sus compañeras más con el ejemplo que con sus palabras”.

“Fue tan grande su humanidad, y sumisión, que la que había sido señora de tantos  criados parecía ahora criada de todos; aunque tanto más era sierva de Cristo cuanto menos era tenida por señora de hombres. Su vestido era pobre y sin ningún esmero, comía cualquier cosa, llevaba los cabellos sin peinar, pero todo eso de tal manera que huía en todo de toda ostentación”.

No sabemos más de esta dama penitente, cuyo recuerdo sólo pervive en las frases que hemos citado de san Jerónimo. La Roma en la que fue una rica señora de alcurnia no tardaría en desaparecer asolada por los bárbaros, y Lea, “cuya vida era tenida por todos como un desatino”, llega hasta nosotros con su áspero perfume de santidad que desafía al tiempo.

Publicado en Cuenca, 22 de marzo de 2020. Actualizado el 22 de marzo de 2024.

Por: José María Rodríguez González. Profesor e investigador histórico.

No hay comentarios:

Publicar un comentario