D. Francisco Valero y Lossa, nace en Villanueva de la Jara (Cuenca) el 3 de diciembre de 1664. Fue hijo ilegítimo de Felipe Valero y Ana de Losa. Inicia sus estudios en la Casa-Convento de la Compañía de Jesús que había en Belmonte (Cuenca). En la Universidad Cisneros de Alcalá de Henares prosiguió sus estudios, licenciándose en Arte y Filosofía, el doctorado en Filosofía lo conseguirá en el año 1690 y la licenciatura de Teología la terminó en el año 1691. Tras la finalización de sus estudios se ordenó sacerdote.
D. Francisco Valero y Lossa |
Cuentan las crónicas que siendo cura de su pueblo, Villanueva de la Jara se vio asediada por las tropas del Archiduque Carlos en la Guerra de Sucesión en el año 1706, cuando se dirigían en retirada de Madrid a Valencia, perseguidos por las tropas borbónicas.
El 20 de septiembre se acercó a Villanueva de la Jara con intención de descansar y avituallarse, pero los vecinos les cerraron las puertas con el cura Valero al frente. Se inició el sitio, pero con parte de la población, y el cura Francisco Valera, consiguieron eludirlo y unirse a las tropas borbónicas que estaban cerca del pueblo.
Con todo ello las tropas del Archiduque Carlos consiguieron entrar en Villanueva de la Jara y según dice la crónica: “tocaron cajas y clarines a degüello y se mandó quemar la villa después de saqueada y muertos sus habitantes”. Esta campaña acabaría con la victoria de los borbones en la Batalla de Almansa, en abril de 1707.
Debido a las calamidades sufridas por el pueblo se mandó una delegación a las Corte, encabezada por el cura Valero, haciéndose popular como defensor de las tropas borbónicas, por ello y a propuesta del rey Felipe V, el nuncio aceptó nombrar a Francisco Valero, obispo de Badajoz. En esta época mandó fabricar el retablo barroco para el Altar Mayor de la Catedral de esta ciudad.
En marzo de 1715 sería promovido a la Sede Arzobispal de Toledo, que estaba vacante desde la muerte del Cardenal Portocarrero en 1709. A él se le debe en gran medida la celebración del Corpus Chisti de Toledo como la conocemos en la actualidad, con anterioridad a su Arzobispado ésta celebración era un tanto carnavalesca.
Falleció en Toledo el 23 de abril de 1720 por complicaciones de la gota. Su cuerpo reposa en la capilla de Ntra. Sra. de la Estrella en la catedral de Toledo.
Publicado en Cuenca, 3 de diciembre de 2020 actualizado el 3 de diciembre de 2023.
Por: José María Rodríguez González. Profesor e investigador histórico.
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