Llama de fuego que
enciende el amor.
Es estos días
están esplendidos los tulipanes de mi patio, lucen como nunca, tal vez por el
periodo de lluvias que estamos teniendo y el que luego salga el sol, está
haciendo que luzcan como ningún, o también puede ser que este año al estar
confinados en casa los esté disfrutando más de lo habitual. Por una razón u
otra les contaré un poco sobre esta flor espectacular y altiva que puebla los
jardines de nuestras casas y patios.
En la
antigüedad los tulipanes eran considerados como una llama de fuego que se
producía en los pétalos de la flor. Es una planta original de Persia, muy
cotizada en el mercado de la vieja Europa y que demostraba el poder adquisitivo
de las familias.
Hoy diremos
que el tulipán es la flor nacional de Turquía e Irán. Es el emblema
floral y símbolo de Holanda, en este país fue introducido en el siglo XVI,
procedente de Turquía. El tulipán es una flor de extremada belleza y
delicadeza.
Los holandeses
se dedicaban al cultivo del trigo hasta que empezó la fiebre del tulipán en el
año 1536 y tal fue la afición que le tomaron al tulipán que se llegó a vender
por 5.000 florines, cuando se vendía una tonelada de trigo por 20 florines. Las
ganancias que se obtenían por la venta de los tulipanes enloqueció a la gente,
razón por lo que todos querían sembrar tulipanes para hacerse ricos con ellos.
Con el tiempo
entraron en juego los floristas, que dañaron el negocio de las flores, porque
se dedicaron a comprar los bulbos para revenderlos y especular con su precio y
no solo eso, llegaron a vender las futuras cosechas de tulipanes sin tener
ninguna garantía de los resultados de éstas. Este tipo de negocio fue conocido
con el nombre de “Windhandel”, lo que significa: negocio del aire, porque todo
el mundo negociaba las plantaciones de tulipanes sin ver el producto de la
futura cosecha.
Como todo en
este mundo del comercio tiene su subida y bajada. Su descenso comenzó en
febrero de 1637. Es palpable este año por lo que se cuenta: se quiso ofertar
una libra de tulipanes en una taberna de Harlem, pero increíblemente no hubo
pujador. A partir de entonces llegó ese triste momento y todo aquel que había
invertido su dinero en los tulipanes se arruinó.
Lograron
recuperar el mercado uniéndose las provincias y hoy en día, los tulipanes son
el principal sustento de Holanda, siendo ellos los máximos exportadores de esta
flor al mundo entero.
La flor en
forma de copa tiene tres pétalos y tres sépalos que se conocen como tépalos porque son casi idénticos. Estas seis
hojas se marcan a menudo en la superficie interior cerca de las bases con los
colores más oscuros. Las flores de tulipanes vienen en una amplia variedad de
colores.
El tulipán es
un género de planta perenne, perteneciente a la familia de las Lileaceae, y a la subfamilia lilioideae. Esta planta euroasiática y
norteafricana, pertenece al orden de los liliales, y es del género tulipa.
La palabra
tulipán, se mencionó por primera vez en Europa Occidental alrededor del año
1554 y posiblemente derive de las cartas turcas del diplomático Orgier Ghiselin de Busbecq. Apareciendo por
primera vez en el vocabulario ingles como tulipa
o tulipán, entrando en el idioma
francés tulipe, aplicándose este
nombre debido a su semejanza con una tulipa.
Cuenta una
leyenda que en el año 1554, el embajador austriaco Busbacq, efectivamente vio a un hombre que llevaba una flor muy
hermosa en su turbante y como no había visto ante una flor de semejante belleza
se interesó por ella y le pidió a su traductor que le preguntara el nombre de
esa flor. El dueño del turbante pensando que se refería a la prenda que llevaba
en la cabeza le dijo: “turbante” y fue así como comenzó a conocerse esta flor
con el nombre de turbante en vez de tulipán.
Las flores y
en concreto los tulipanes se han utilizado para expresar, sin muchas palabras,
lo que uno siente por una persona. Desde el nombre de la flor y sus
características distintas hacen de ellas un mundo de significado y simbolismo.
El significado
puede variar con relación al color que posea, así el tulipán amarillo simboliza
el pensamiento alegre, los blancos transmiten perdón. Un ramo de tulipanes
siempre es signo de elegancia, gracia y distinción.
El color rojo
ha sido asociado siempre con el amor y la pasión y los tulipanes rojos no son
una excepción ya que desde tiempo se ha intercambiado esta flor entre los
amantes.
Con relación
al tulipán rojo se cuenta una leyenda de amor muy bonita, o al menos me parece
a mí. Se la cuento muy breve: Se dice que el príncipe, conocido con el nombre
de Farhad, se enamoró de una doncella
de nombre Sharim que no era de sangre
real. Entre ambos surgió un amor tan grande que la envidiaron las jóvenes
princesas. Una tarde cuando iba al encuentro de su amado fue asesinada por
envidia, clavándole una daga en el corazón. Cuando llegó el suceso a los oídos
del príncipe Farhad, no pudo soportar
tanto dolor que enloqueció y decidió poner fin a su vida. Para encontrarse de
nuevo con su amor, se cortó las venas y montó en el caballo con el que habían cabalgado
juntos, con la esperanza de llegar cuanto antes al encuentro con su amada en la
otra vida. Se dice que de cada gota de sangre que llegó al suelo brotó un bello
tulipán rojo escarlata, con un corazón oscurecido por el calor de la pasión, es
por ello que el significado del tulipán rojo es el amor y la pasión.
Para no
hacerlo más extenso, otro día sigo contando más historias sobre el significado
de los distintos colores de los tulipanes.
Cuenca, 17 de
abril de 2020.
José María
Rodríguez González. Profesor e investigador histórico.
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