Este año el efecto se dará entre el 23 al 28 de
julio de 2024 entre las 10.00 y 10:20 horas.
Año tras año me gusta recordar los efectos lumínicos que se dan en nuestra Catedral. No es un hecho aislado pues este efecto se da en otras catedrales y templos de la misma época.
Es un momento emocionante digno de presenciado y vivido.
Milagro de la Luz.. 26 de julio de 2018.
Capilla del Transparente. Catedral de Cuenca.
Foto. José María Rodríguez González.
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Estos efectos son heredados de
las antiguas construcciones egipcias, griegas y romanas. Este ritual de luz
está unido a la orientación del templo, estableciéndose una relación de la fábrica con el Cosmos. En la antigüedad
clásica, los templos tenían la puerta de entrada hacia el Este, de forma que al
salir el Sol, los rayos de luz iluminaban la estatua del dios que poseía en su
interior, como sucede en el templo de Ramsés II, llegando el sol hasta los pies
de las estatuas de Ra y Amón en los Equinoccios. Con el cristianismo y tras el
Concilio de Nicea (año 325) se estableció que fuera la cabecera la que
estuviera orientada a la salida del Sol. De este modo, al amanecer los primeros
rayos de Sol entraban a través del ábside, identificando la luz con el mismo
Cristo. “Yo soy la luz del mundo; el que
me siga no caminará en la oscuridad, sino que tendrá la luz de la vida”
(Jn. 8, 12). En el cristianismo y en el Solsticio de verano (21 de junio) los
rayos del Sol penetrando por el óculo central de la girola llegan su luz hasta
la capilla del Transparente, donde hay una Lucerna
que comunica con el Presbiterio, haciendo llevan la luz del Sol, hasta el altar
mayor, que es el centro del templo. Hace unos años el altar estaba adosado al
retablo, por lo que la luz del Sol formaba un círculo oval sobre él. Esta
orientación Este-Oeste posee otra significación simbólica: La puerta se
estableció al Oeste porque es el lugar de menos luz, simbolizando al mundo
pagano, el mundo de la oscuridad. Al entrar avanzamos hacia la luz en una
progresión sagrada, como recorriendo un camino de salvación, camino que conduce
a la Ciudad Divina donde brilla el Sol de Salvación.
Nuestra Catedral posee una cierta peculiaridad con relación a éste
hecho. En el siglo XV, siendo Obispo Lope Barrientos, se acometió una gran obra
en su interior, realizándose la doble girola, quedando tal como la conocemos en
la actualidad. Este hecho desplazó el óculo original de la obra lo que ha
ocasionado que el MILAGRO DE LA LUZ se dé un mes antes que en los demás templos
con las mismas características que el nuestro, siendo del 19 al 22 de mayo
sobre las 9:45 horas.
Hay otra particularidad y es que al no coincidir la entrada de los rayos
solares con el solsticio de verano (21 de junio) el Sol sigue su trayectoria
orbital hasta su máxima declinación Norte, permaneciendo durante varios días en
esa altura máxima. Pasado unos días el Sol vuelve a declinar y se invierte la
situación, los días van disminuyendo de duración y lentamente su órbita va
bajando.
Si la primera entrada de los rayos solares a la capilla del
Transparente se dio 33 días antes del Solsticio de verano, en el descenso del
Sol el efecto lumínico en la Catedral conquense vuelve a darse 33 días después
del Solsticio, es decir entre los días del
23 al 28 de julio, sobre las 10.15 horas.
Cuenca, 21 de julio de 2020. 22 de julio de 2024.
José María Rodríguez González. Profesor e investigador
histórico.
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