Es una de las capillas más antiguas de la Catedral
En la nave del Evangelio y después
del retablo barroco de la Virgen de las Nieves y junto al arco de Jamete esta
la capilla de Santa Catalina de Alejandría, cuya festividad se celebra el 25 de
noviembre.
Santa Catalina en la Catedral de Cuenca. |
Esta capilla es una de las más
antiguas de la Catedral. Su construcción es de estilo gótico, fechada en la
primera mitad del siglo XV. Su interior nos muestra una sencilla bóveda de
crucería, con su clave central y sus cuatro ménsulas sobre las que descansan
sus nervios, con una doble portada formadas por arco de medio punto, con dos
baquetones góticos a cada lado de la entrada. El quicio de ambas puertas es de
madera, sus barrotes, sencillos y redondos y los montantes, semicirculares en
ambos casos y presididos por el escudo de armas de la casa del que fuera el
primer patrón de la capilla, D. Luis de Guzmán, por cesión del Cabildo en el
año de 1598.
La primera vez que se hace
alusión a esta capilla es por el Obispo Lope Barrientos aludiendo a su
constitución por el reverendo D. Pedro Bahamonde (Vaamonde) Canónigo de esta
Catedral y que fue nombrado Obispo de Mondoñedo en el año de 1446 y que dotó
para su mantenimiento de la prestamera del Castillo junto con su dehesa.
Esta capilla durante muchos años
siguió perteneciendo al Cabildo, hasta que D. Luis de Guzmán muestra sus deseos
de tenerla para enterramiento de sus familiares.
Ante los grandes destrozos ocasionados
en la torre del campanario por un rayo que cayó el 9 de mayo de 1597 y
hallándose el Cabildo con necesidades económicas, accede a su venta el 24 de
octubre de 1597 por un montante de cinco mil ducados. La escritura se hizo
efectiva el día 11 de septiembre de 1598, en la sala del Cabildo de Cuenca,
ante el escribano público, D. Gabriel Ruiz.
Las rejas son de madera, del
siglo XVII y posiblemente de Pedro de Arenas. La capilla posee un rico retablo
renacentista de principio del siglo XVI, sobre el año de 1520 a 1525. Su autor
no está definido con certeza pero por su estilo y composición bien pudiera ser
de Hernando Yáñez de Almedina.
Martirio de Santa Catalina. |
El retablo está formado por una
tabla central en la que se reproduce a la Santa titular de la capilla. La
escena en ella representada es la del martirio de Catalina de Alejandría, también
llamada Catalina del Monte Sinaí, al aparecer su cuerpo en la gruta del monte
Sinaí. Está basado en la leyenda medieval que asegura que Catalina,
descendiente de nobles, fue entregada a los verdugos por su tenacidad en
defender y mantenerse en la doctrina de Cristo. Según la alegoría del cuadro,
parece ser que fue entregada por su propio padre, personaje que aparece montado
a caballo acompañado por tres sirvientes, dos de ellos vestidos de soldados
romanos y que permanecen en segundo plano. Catalina aparece arrodillada delante
de la rueda de cuchillos que había de servir para su martirio, y entre los
esbirros que habían de ponerla en movimiento, abatidos todos ellos y alguno mal
herido y ensangrentado por la lluvia de piedras que para deshacer la rueda del
martirio envían los ángeles desde el cielo.
Todos estos detalles que describo
proceden de las leyendas que en el anterior artículo mencionaba cuando hablaba
de la “passio”, que es una obra griega, escrita entre los
siglo VI-VIII, y se cree que el redactor fue un monje del convento del Monte Sinaí,
donde se cree que fue depositado el cuerpo de Catalina por los mismos ángeles.
Esta narración fue considerada como una biografía histórica y contribuyó, en
gran medida, a la difusión del culto de la Santa Catalina. En esta tabla se
hace patente la historia del relato.
Hay que destacar también el grupo
escultórico que existe en la tabla central del montante, con cuatro figuras en
alto relieve. Representa a la Virgen
María de pie con el Niño sobre su brazo izquierdo, detrás de ella y también de
pie, un ángel. Delante de la Virgen un caballero de rodillas tomándole su mano
derecha como señal de aceptación y benevolencia, el caballero parece sostener
un báculo en su mano izquierda y está considerado como San Antonio Abad, el
fundador de la vida eremítica en la prodigiosa Tebaida del siglo III.
A cada lado izquierdo del retablo hay una
inscripción que transcribiéndola dice: “Aquí
yace la señora doña Isabel de Torre viuda de García Zapata vecino de Inista, que
en esta capilla fundó dos capellanías y un sacristán, con otras memorias, de
que dejó por patrón al señor don Luis Guzmán, su primo y su heredero, por vía
de patronazgo. Fallecido a 30 de Diciembre de 1599 R.I.P.”
En el lado derecho y bajo el
escudo de armas de los Guzmanes dice: “Esta
capilla de la advocación de Sta. Catalina de Monte Sinaí compró de la Fábrica
de esta Sta. Iglesia y de sus bienes la dotó de capellán y memorias D. Luis de
Guzmán, caballero de la Orden de Calatraba, Regidor de esta ciudad;
fue dos veces procurador de Cortes por ella, y una diputado de los Reinos, desde el año 1592 hasta el de 1605, continuamente, en que ordenaron muchas cosas del servicio de Dios y de Su Majestad, en bien del reino y utilidad de esta ciudad y su provincia; dejó por patrón a don. Gaspar de Guzmán, su hijo, caballero de la Orden de Santiago y regidor de Cuenca, y de doña Mariana Muñoz, su mujer, y nombró sucesores por vía de mayorazgo murió de edad de 64 años, a dos de abril de 1617 años. R.I.P.”
fue dos veces procurador de Cortes por ella, y una diputado de los Reinos, desde el año 1592 hasta el de 1605, continuamente, en que ordenaron muchas cosas del servicio de Dios y de Su Majestad, en bien del reino y utilidad de esta ciudad y su provincia; dejó por patrón a don. Gaspar de Guzmán, su hijo, caballero de la Orden de Santiago y regidor de Cuenca, y de doña Mariana Muñoz, su mujer, y nombró sucesores por vía de mayorazgo murió de edad de 64 años, a dos de abril de 1617 años. R.I.P.”
Publicado en Cuenca, 25 de noviembre de 2020 y 25 de noviembre de 2023.
Por: José María Rodríguez González.
Profesor e investigador histórico.
No hay comentarios:
Publicar un comentario